En esta cuarentena aprovechamos para repasar algunas obras clásicas que tenemos ahí en la biblioteca y la que recién releí fue esta obra maestra de principios de los 90´s, la cual fue editada bajo el sello DC Comics, un dato interesante es que las subsecuentes reimpresiones y la serie del mismo nombre que surgió posteriormente fueron editadas en el subsello Vertigo.
The Books of Magic fue presentado en 1990 por Neil Gaiman (Sandman, Coraline, American Gods) como escritor y cada número es dibujado por un artista diferente, así, John Bolton (The House of Hammer, Hellraiser, Man-Bat), Scott Hampton (Batman, Sandman, Black Widow), Charles Vess (The Book of Night, Web of Spider-Man, Sandman #19 “A Midsummer Night’s Dream”) y Paul Johnson (London’s Dark, Hellraiser, Legends of the Dark Knight) nos legaron esta obra.
En la mini serie conocemos a Tim Hunter, un niño que podrá ser el mago más grande de todos, si decide formar parte del mundo de la magia, aunque su lealtad al bien o al mal aún no está decidida, Tim es abordado y guiado por cuatro magos del universo DC para mostrar el pasado, presente y futuro de la magia en el universo, así como sus implicaciones, algunos de los elementos de este personaje fueron retomados para la creación, conscientemente o no, de Harry Potter, el mago más famoso del mundo, al ser el niño predestinado, usar lentes, tener una lechuza como mascota, entre otras.
Así pues, en el primer número vemos que “la brigada de las gabardinas” integrada por John Constantine, Phantom Stranger, Dr. Occult y Mister E toman la decisión de enseñar a Tim las consecuencias del uso de la magia y la responsabilidad de inmiscuirse en este mundo.
Así, Phantom Strange toma la batuta y lleva a Tim hasta el principio mismo de los tiempos, presencian la batalla primigenia, la primera rebelión. la rebelión de los ángeles, la caída del más orgulloso, del más hermoso y poderoso, de Lucifer, la estrella de la mañana, así como a los seis arcángeles, Dr. Occult le platica acerca de los seres que habitaron la Tierra antes de la llegada de la humanidad, su ascenso y su caída, la historia de la magia a lo través de las civilizaciones previas e incluso conoce a un joven Merlin, a lo largo de su viaje Tim va aprendiendo lo que la magia es para sus practicantes y el peso a sus almas, pero también la continua guerra entre magia y ciencia y como son mutuamente excluyentes.
El siguiente paso es conocer a diferentes personalidades “actuales” de la magia, de la mano del buen John Constantine, viajan a Estados Unidos a visitar a Madame Xanadu, quien le lee las cartas a Tim, vislumbrando un terrible, pero grandioso futuro, es salvado de un atentado por The Spectre, también por Boston Brand, escapan de un atentado en carretera, conoce a Dr. Fate y va a una fiesta muy especial con Zatanna, la hermosa maga, donde todos han escuchado de Tim Hunter y desean asesinarlo.
Dr. Occult es el siguiente y su contraparte, Rose, lleva a Tim a una fantástica travesía por el país de las hadas, literalmente, pasan por el mercado, el río de sangre, a la tumba del rey Arturo, el que duerme debajo de la colina, Tim es apresado por Baba Yaga e incluso conoce a la reina Titania quien le muestra los mundos más allá de la razón, donde saluda al mismísimo Dream, el eterno, el regente de la Ensoñación.
El último número nos muestra a Mister E llevando a Tim hacia el futuro o hacia algunos de los posibles futuros, vemos un futuro cercano donde se lleva a cabo la última de las batallas de la magia, con Tim en algunos futuros en un bando y en otros, decidiendo la batalla hacia el otro bando, una batalla donde intervienen todos los seres mágicos existentes, viajan más allá, al siglo treinta, mil años en el futuro, una época de héroes donde la magia ha regresado, el siglo sesenta la Tierra se ha segregado del resto del mundo, en la práctica hay más ciencia que tecnología, dentro de un millón de años conoce a los últimos habitantes de la Tierra, van tan adelante en el tiempo que el resto del “escuadrón de la gabardina” no les puede detectar, han llegado al mismísimo Big Crunch, el fin de los tiempos, donde los últimos habitantes de Términus esperan el gran final.
Mister E ha tomado una decisión respecto a Tim y no es la que esperábamos, al final conoce a los eternos Destiny y Death, esta última es quien los manda de regreso por diferentes caminos.
La miniserie original “The Books of Magic” es considerada una de las mejores historias de todos los tiempos en el mundo del noveno arte, al ser una miniserie nos presenta una historia muy digerible y con personajes bien definidos, un protagonista entrañable, muchas aventuras y dilemas morales, fue tal su éxito que tuvo una longeva serie posterior y actualmente se edita una nueva serie protagonizada por Tim Hunter y su desarrollo como el mago más grande que el mundo ha conocido.
Neil Gaiman, como siempre, nos deslumbra con su imaginación, llevando a Tim en un viaje para descubrir el pasado, el presente, los reinos mágicos y el futuro, pero también nos deja pensando en cuestiones que no son explicadas en el libro, dejando semillas para historias y disertaciones futuras, algo muy común en el escritor inglés.
En lo particular amé todos los estilos gráficos de la serie, pero mi favorito, por mucho fue el primer tomo a cargo de John Bolton y, si me preguntan, amé toda la serie, pero sentí más cómodo a Gaiman en el tomo tres, “La tierra del crepúsculo de verano” con obvias reminiscencias al número 19 de la serie Sandman del mismo autor “A Midsummer Night’s Dream” que había visto la luz en septiembre de 1990.
Sin duda una obra indispensable para los amantes del noveno arte.
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Calificación 9.5 /10
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