Reseña de Krakens y Sirenas: Conoce a los Gillman

Siguiendo con esta temática de problemas entre padres e hijos, llega a cines esta semana Krakens y Sirenas: Conoce a los Gillman, una película de Dreamworks, estudio que trajo películas como Shrek y Cómo Entrenar a tu Dragón, por lo que podemos esperar un trabajo a nivel técnico similar a estos productos… o no.

Ruby Gillman es la protagonista de esta historia. Viene de una familia de Krakens, que por unas cuestiones que se revelan durante la trama, tienen que salir de océano y mezclarse entre los humanos. Para ello, manejan la narrativa que son “diferentes” ya que vienen de Canadá, y para des-aparentar las evidencias, los miembros de la familia tienen trabajos o actividades similares a las personas: Flora, mamá de Ruby, es vendedora de vienes raíces; Peter Gillman, papá de Ruby, es una especie de YouTuber, en donde muestra como hacer botellas de cristal con barcos dentro, tipo videos ASMR, mientras que nuestra estrella principal estudia en la escuela Oceanside.

Ruby al ser una adolescente, tiene las mismas inquietudes que una y desesperada por querer encajar en la sociedad. Su sobreprotectora madre no le permite relacionarse del mismo modo que una persona de su edad, ya que tiene prohibido acercarse al mar, sin saber el motivo en concreto del porqué no debe de hacerlo. Pero todo se rompe cuando Ruby va a tener su baile de graduación y su madre le prohíbe ir, ya que será en un bote sobre el mar, por lo que sigue el mal consejo de sus amigos de no decirle nada e intentar invitar a su crush de la escuela, Connor.

Pero cuando estaba a punto de decirle, sucede un accidente en el que Connor cae al mar y tendrá que aventarse al agua, desobedeciendo las ordenes de su madre de no meterse jamás al océano. Pero después de rescatar a Connor, Ruby empieza a experimentar fenómenos raros en su cuerpo, por lo que empieza a crecer desmedidamente, al grado de ser lo suficientemente grande que una montaña. Aquí descubre que viene de un linaje antiguo de Krakens, protectores del mar, y que las mujeres tienen la capacidad de convertirse en grandes criaturas, por lo que el mar le hará un llamado a Ruby para abrazar su destino, o seguir queriendo encajar en la sociedad.

Creo que el principal problema de la película, es su storytelling. La verdad, si es algo aburrido el como ligan la historia y como la cuentan. Últimamente hemos tenido estos trances de la adolescencia y las relaciones entre madres e hijas y esta película justamente trata de esto, pero de una manera no tan orgánica (me recuerda a una que justamente se estreno esta semana, compañía del ratón).

En cuanto a nivel técnico, queda lejos de las mejores de DreamWorks Animation. No se sabe a ciencia cierta si fue falta de presupuesto o de fe al proyecto, que la animación queda a deber, sobre todo teniendo la posibilidad de poder explorar las profundidades del mar y mostrar con mas esplendor el reino de los Krakens. Aunque si es colorida, defrauda en mostrar todo el potencial que DreamWorks demuestra en sus producciones, y siendo una película que podría iniciar una franquicia nueva, queda a deber en este ámbito.

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By Rafael Di Navarro

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