Pablo Larraín logra, sin lugar a dudas, una de las películas más sobresalientes de los últimos años con Maria Callas, protagonizada por Angelina Jolie. Desde los primeros cinco minutos, queda claro que se trata de una obra finamente elaborada, con una visión meticulosa de la vida de la legendaria cantante.

Sinopsis

Esta película biográfica se adentra en los últimos años de la vida de Maria Callas, la soprano más influyente de los años 70. En este viaje hacia su inevitable final, Callas recurre a sus recuerdos, deseos y sueños para sobrellevar el dolor profundo que la ha acompañado desde su adolescencia.

Análisis del Filme

Como se mencionó al inicio, este es un trabajo que trasciende como una ópera prima. Cada uno de sus elementos se entrelazan con una elegancia y profundidad que rinden homenaje a la esencia personal y escénica de Callas. Larraín no solo captura su vida, sino que la eleva con una visión artística inigualable, sumergiéndonos en la década de los 60 y 70 con una mezcla de misterio y belleza.

La dirección de Larraín es magistral; su empatía con la figura de Callas se traduce en una unificación perfecta entre fotografía, sonido, diálogos, vestuario e interpretaciones, todo ello de manera poética. Es raro que un director logre un amor tan genuino por una historia; Larraín no solo documenta la vida de Callas, sino que se adentra en la interpretación emocional de su ser.

La Fotografía: Un Personaje en Sí Misma

La fotografía de Maria Callas es, sin duda, un elemento digno de aplausos. A través de cambios de formato, colores y tonos, la película no solo nos presenta momentos de su vida, sino que nos transporta al interior de sus recuerdos, sus ilusiones y su dolor.

En los recuerdos más significativos de Callas, la fotografía se presenta en blanco y negro, un estilo nostálgico que evoca melancolía y sufrimiento, casi con un aire afrancesado. En contraste, los momentos más felices, aquellos relacionados con su romance, fama y presentaciones, son retratados en un vibrante formato Super 8, con una paleta de colores vivos que remiten al estilo italiano de la época.

El presente de Callas, lleno de sueños y deseos, se presenta con colores cálidos y planos generales que simulan un ambiente onírico. Sin embargo, estas ilusiones se entrelazan sutilmente con los recuerdos, y es aquí donde el guion demuestra su excepcional habilidad para manejar la dualidad temporal.

El Guion: La Columna Vertebral del Film

El guion se erige como la columna vertebral de la película, trazando un collage de recuerdos y momentos significativos con una claridad que evita cualquier confusión entre pasado y presente. Cada diálogo, cada contexto, se ensamblan perfectamente en un storyboard detallado, cuyas huellas son evidentes en la impresionante fotografía.

Vestuario y Escenografía: La Magia de la Época

El vestuario es otro de los elementos que sobresale, con trajes elegantes y sofisticados que solo alguien como Maria Callas podría portar con tanto porte. La meticulosidad con la que se replican estos atuendos es de admirar. A esto se suma una escenografía impecable que, sin ser ostentosa, crea un ambiente envolvente que complementa perfectamente la narrativa. Es difícil no enamorarse visualmente de esta película, que es, en definitiva, una obra de arte.

Angelina Jolie: Una Transformación Admirable

La interpretación de Angelina Jolie merece un reconocimiento especial. No solo estudió la vida de Callas en profundidad, sino que también se entrenó en la ópera, mostrando una dedicación admirable a su rol. Como artista de método, Jolie logra una actuación impresionante, y con certeza podemos afirmar que esta ha sido una de sus interpretaciones más destacadas de su carrera.

Conclusión: Un Homenaje al Gran Cine

Maria Callas es una película que no solo debe ser vista, sino también apreciada y celebrada por el arduo trabajo detrás de ella. Se aleja de los minimalismos, los diálogos vacíos y las escenas innecesarias que a menudo invaden el cine contemporáneo. En cambio, es una obra que nos recuerda el cine como una de las grandes artes, con toda su magnitud, dedicación y amor. Es un regreso al cine de los años 60, ese que era ovacionado al final de la función, el gran cine que sabía cautivar al espectador.

Sin lugar a dudas, te recomendamos ver Maria Callas en la pantalla grande de tu cine favorito y, para complementar la experiencia, escuchar una de las inolvidables interpretaciones de la propia Callas.

Aquí te dejamos el tráiler para que lo disfrutes: