Las películas con grupos musicales interpretándose a si mismos no son una novedad. Basta recordar la obra maestra del cine “Cambiando el Destino” interpretada por Magneto:
Ahora Los Foo Fighters nos traen una cinta de terror donde después de un bloqueo creativo, van a una vieja casa con una vibra muy extraña para poder grabar su disco. Eso es Terror en el Estudio 666
La película es del subgénero llamado Serie B, es decir, de (aparente) bajo presupuesto. Con actuaciones exageradas, historia sencilla e inverosímil, maquillaje y efectos especiales de baja gama, mucha mucha sangre y violencia muy gráfica. Todo adornado con un soundtrack sensacional (no se puede esperar menos de una banda de ese calibre.
Las actuaciones de los miembros de la banda fueron hechas “como Diós les dió a entender”, no se preocupan en brindar actuaciones ganadoras de premios y ni lo necesitan. Solo dan una versión un tanto exagerada de si mismos, lo cual es ideal en el género de la película. Lo más importante es que se nota que se están divirtiendo muchísimo y lo proyectan a los fans, volviendo esta cinta un regalo para su legión de seguidores.
En conclusión: No esperes una película que viene a revolucionar el género de horror, solo hay que ir a ver terror aderezado con comedia absurda. A pesar de que no seas EL FANÁTICO de la banda te la pasarás bien, aunque pases por alto alguna que otra referencia. Por cierto, tiene un cameo genial de un cantante muy famoso en los 80.