Una de las películas más anticipadas de este mes, sobre todo en México, era la de Cocaine Bear u Oso Intoxicado, como fue su traducción en el país. Esta loca historia inspirada en hechos reales sirvió de inspiración para la realización de este largometraje, lo que también le dio un punch al hype de la película, sobre todo a aquellos que gustan y disfrutan de ver este tipo de historias locas en el cine.
Como previamente se mencionó, el Oso Intoxicado está basado en unos hechos reales que sucedieron en el año 1985 en Estados Unidos. Un avión que transportaba muchos kilos de cocaína, dejó caer varios paquetes en un bosque a las afueras de Georgia, los cuales la mayoría fueron rastreados y consumidos por uno oso que se encontraba por ese lugar. Y como si la historia fuera sacada de una película estilo Scary Movie, el oso se volvió un adicto y causo estragos en la comunidad.
Por muy loca e inverosímil que suene la trama, así pasó. El oso entró en un estado salvaje al consumir esta droga, lo que provocó la muerte de varias personas que se encontraban en el bosque en el momento en que estaba bajo los efectos de la cocaína, por lo que dejó un rastro de sangre en su camino.
La película no decepciona en lo que nos tiene que mostrar. Se saltan todo este tramo de querer explicar como fue que este oso encontró todos esos paquetes para introducirnos desde los primeros minutos una acción desenfrenada, que poco a poco va escalando en salvajismo y gore. El film lleva un ritmo rápido, lo que ayuda para que la película se sienta fluida todo el tiempo que dura en total y repito, desde los primeros minutos se nos introduce la acción que a ratos cesa, pero que vuelve a arrancar con toda la ferocidad que puede dar un oso drogadicto.
Este largometraje esta dirigido por Elizabeth Banks, que podremos recordarla por estar presente en la saga de The Hunger Games, además de ya tener algunas películas dirigidas en su haber. Entre los actores que podemos ver se encuentran el hijo de Ice Cube, O´Shea Jackson Jr, así como la presencia del actor Ray Liotta, que falleció el año pasado, marcando así que sea de sus últimas apariciones, si no es que la última, en el cine. El cast se complementa con Keri Russell, Christian Convery, Alden Ehrenreich, por mencionar algunos.
Un film divertido, sangriento, no apto para sensibles y que buscan algo serio. Aunque en la historia real termina con una tragedia, en la película decidieron mejor contarla en una comedia, con situaciones sobre-exageradas y aquí veremos masacres desde el minuto 1, además de grandes consumos de este estupefaciente no solo de oso, si no de hasta niños que tuvieron la gracia de encontrar paquetes en el bosque también. Si pudiéramos definir en pocas palabras lo que es esta película, definitivamente sería el de “hoy ganó el cine“.
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