Aracnofobia es una película francesa de terror dirigida por Sébastien Vanicek que llegará a los cines este 21 de marzo. Con críticas divididas nos atrevemos a decir que este film representa el terror absoluto para aracnofóbicos, ¿lo será para la audiencia en general? Aquí te lo comentamos.

Sinopsis

Kaleb, un joven con una fascinación peculiar en insectos y reptiles exóticos adquiere una araña de una especie desconocida. Al llevarla a su pequeño departamento no dimensiona lo que ésta ocasionaría, un caos total no solo en su recamara sino en todo el edificio.

Esta araña tiene la posibilidad de evolucionar de una forma increíblemente rápida, lo que hace que sea casi imposible de exterminar. Kalep y sus amigos comienzan la huida de aquel lugar mientras recuerdan historias del pasado.

Nuestra crítica (sin spoilers)

El comienzo es como cualquier otro de una serie, un pequeño clip de lo que parecería ser la contextualización de la historia. A pesar de tener una escena ‘’shokeante’’ se queda corta, el filme podía seguir su curso sin la necesidad de esa introducción.

El desarrollo no tiene un ritmo adecuado para el género que representa, tenemos un inicio sumamente lento, un desarrollo rápido y una conclusión sin pies ni cabeza. Al decirte esto ya te damos por hecho que el guion no fue brillante. Sabemos que los filmes de terror requieren de mucha creatividad para lograr que la audiencia a pesar de sentir terror, se enganche con la historia. Esto no pasa aquí.

A pesar de que hubo una intensión clara de incluir historias emocionales como pérdidas o peleas no logramos conectar con ninguno de los personajes.

El desarrollo de éstos carece de profundidad, no se logra empatizar con sus recuerdos personales o  darles un valor importante dentro del argumento de la historia. En el cine, es sustancial, como todos sabemos, un buen desarrollo psicológico de los personajes para poder conectar con la historia y/o entender el porqué de sus decisiones y actitudes.

Las actuaciones en general se encuentran en un rango normal, y no se les puede culpar si no tienen un perfil detallado de sus personajes, ya que en su labor está el vivir, sentir y pensar como ellos. Hicieron lo que estuvo en sus manos y se les puede acreditar por esto.

La elección sonora fue genérica, con trap y música de piano o violonchelo buscaron darnos una atmosfera terrorífica y emocional, sin embargo, lo único rescatable fueron los sonidos ambientales. Creemos que no fue necesario incluir trap en cualquier momento o un piano para invitarnos a llorar una situación decepcionante, a veces el silencio puede hacer mucho en los filmes.

La fotografía cumple con su función y se entiende que se trata de un filme del género de terror. Sus planos son amenos y sus ejecuciones estuvieron bien hechas. En este punto se llevan una buena mención.

Finalmente, podemos decir que hubo otro acierto: el uso de arañas reales. En un inicio podrás observar arañas terroríficas que podrás encontrar en la vida real. Justo cuando éstas salen en escena es cuando se logra tocar las entrañas del espectador, sin embargo conforme va avanzando la historia y comienzan a salir arañas con efectos especiales se va perdiendo totalmente el sentido de terror que nos promete esta historia.

A pesar de las presentaciones que se nos han dado en otros sitios como ‘’la mejor película de terror del año’’, podemos decir que en audiencia mexicana no se le tomará tal cual, a menos que la vea algún aracnofóbico, porque eso sí, habrá arañas por doquiera, pero para una audiencia generalizada lo dudamos un poco.

¿Quiénes están detrás del filme?

En la dirección se encuentra Sébastien Vanicek, quien también trabajó en el guion junto con Florent Bernard. En la musicalización tenemos a Douglas Cavana y Xavier Caux.

En el cast participan: Théo Christine, Sofía Lesaffre, Finnegan Oldfield, Jérome Niel, y Lisa Niarko.

Podrás aportar tu propia crítica a partir del 21 de marzo en el cine de tu preferencia. Coméntanos ¿Qué esperas de esta historia? ¡Te leemos en los comentarios.